¿Qué es el agua micelar y cómo funciona?

En 1995, el Laboratorio BIODERMA creó la primera agua micelar que se vendió en el mundo.

Trabajando originalmente con y para dermatólogos, Bioderma diseñó un producto para el cuidado de la piel que se adaptaba más a la biología natural de la piel, para abordar los problemas de la piel sensible: el agua micelar Sensibio H2O.

Sensibio H2O se ha consolidado como una nueva acción de limpieza, un solo paso sin enjuague inspirado en los lípidos de la piel. Esto alteró el tradicional dúo de leche limpiadora y tónica, además de hacer que la rutina para desmaquillarte sea más corta y eficiente.

Hoy en día, Sensibio H2O de BIODERMA se ha convertido en el producto de limpieza de primer nivel entre los recetados por dermatólogos.

Esta nueva agua micelar limpiadora es una invención pionera en el campo del cuidado de la piel, ha revolucionado los rituales desmaquillantes de las mujeres y hombres en todo el mundo.

Desmaquillarse se ha convertido ahora en un procedimiento simple y saludable, compartido por muchos:

Una botella de agua micelar Sensibio H2O se vende cada segundo en algún lugar del mundo.

Para desmaquillar o simplemente limpiar la piel, nuestras aguas micelares BIODERMA se adaptan a todas las necesidades y tipos de piel, gracias a nuestra respetuosa tecnología micelar.

Micelas ... ¿Qué son y cómo funcionan?

Un tensoactivo tiene dos polos diferentes;

uno hidrófilo (que significa que es soluble en agua)
y uno lipófilo (que captura las partículas de grasa, siendo esta última incompatible con el agua). Siempre que se agrega el surfactante, se transforma en lo que se llama una "micela", una estructura que tiene la forma de una microesfera invisible.

El agua micelar por sí sola no puede limpiar todas las partículas de suciedad que se acumulan en la piel todos los días, especialmente las grasas. Esa es la razón por la que la mayoría de los productos para el cuidado de la piel contienen agentes limpiadores, llamados surfactantes.

Existe una gran variedad de tensoactivos que se utilizan en cosméticos y algunos de ellos pueden resultar inadecuados o demasiado agresivos para la piel. Durante la limpieza facial, interactúan con los diversos componentes de la piel y, si el producto ha sido mal elegido, puede dañar la sutil película hidrolipídica de la piel.

¿Por qué no es bueno tallarse la cara con cualquier jabón?

Demasiada limpieza, especialmente con productos abrasivos, es a menudo tan nociva como la falta de limpieza. Pueden causar irritación y dañar la piel.

Todas las aguas micelares de Bioderma utilizan un único tensoactivo, no iónico y suave para la piel, un éster de glicerol, cuya estructura se inspira en los lípidos ya presentes en la piel. Así, la barrera natural de la piel se limpia delicadamente, de forma no agresiva.

El agua contenida en nuestras aguas micelares garantiza el respeto total de la barrera natural de la piel, incluso con las pieles más sensibles. Hecho solo con elementos amigables para la piel que seleccionamos cuidadosamente, las aguas micelares de Bioderma no necesitan enjuagarse. No dejan película pegajosa o grasa en la piel, para una sensación de confort natural.

Nuestras aguas micelares son simples desmaquillantes… ¿o no?

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