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Comprender los beneficios del ácido salicílico y el ácido hialurónico en el cuidado de la piel

Tiempo de lectura : 5 min

Textura de ácidos salicílico e hialurónico

¡Sí! El ácido salicílico e hialurónico proporcionan acciones complementarias, especialmente para las pieles propensas al acné. Trata las imperfecciones y los primeros signos del envejecimiento al incluir ambos ácidos en un solo producto. Con las nuevas soluciones que se introducen regularmente al mercado dermocosmético, puedes encontrar productos de skincare adaptados a tu tipo o condición de la piel que incluyen ambos ácidos.

Mima tu piel con los beneficios de los ácidos salicílico e hialurónico

 

Los ácidos salicílico e hialurónico funcionan de diferentes maneras. Presente de forma natural en la piel, el ácido hialurónico es un humectante que acumula agua y vapor y ayuda a mantener la piel hidratada. En cuanto al ácido salicílico, en los productos para skincare, es un ingrediente conocido especialmente por la renovación de la piel. Combinados en un solo producto para el cuidado de la piel, como un sérum, los dos ácidos aportan cuatro ventajas principales.

 

  1. Exfoliante y limpieza de poros
    El ácido salicílico exfolia la piel, eliminando las células muertas, lo que ayuda a destapar los poros y reducir su tamaño.
  2. Reducir la inflamación
    Al exfoliar y mantener los poros limpios, el ácido salicílico también ayuda a reducir la inflamación. Sin las bacterias y la suciedad que se acumulan en los poros, hay mucha menos irritación.
  3. Antienvejecimiento
    Tanto el ácido hialurónico como el salicílico actúan sobre los signos del envejecimiento, ayudando a la piel a mantenerse tersa y aportándole un extra de volumen. 
  4. Hidratante
    Más que simplemente hidratar la piel, el ácido hialurónico ayuda a la piel a retener la humedad, para que se mantenga hidratada y en buen estado de salud.
Mujer frente al espejo

¿Cómo ayudan el ácido salicílico y el ácido hialurónico a las pieles grasas y propensas al acné?

 

Los adultos que sufren de acné también deben lidiar con los primeros signos del envejecimiento. El sebo oxidado y la bacteria Cutibacterium acnes son en gran parte responsables de producir imperfecciones como puntos negros, pápulas y pústulas. Estos se ven agravados por las líneas finas de expresión y las primeras arrugas. Por lo tanto, la combinación de ácidos salicílico e hialurónico en un solo producto tiene mucho sentido: se complementan entre sí. Un adulto con piel propensa al acné necesita aplicar un solo producto para proporcionar cuidado a su piel para dos problemas diferentes.

Ácido salicílico: el limpiador exfoliante

 

El ácido salicílico, un betahidroxiácido que se utiliza en dermatología para tratar una serie de trastornos de la piel, se disuelve en la fase acuosa de un producto para el cuidado de la piel y actúa en la superficie. Con el acné, las células muertas de la piel tienden a amalgamarse y acumularse en la superficie de la piel. Este engrosamiento de la piel, llamado hiperqueratinización, es una de las razones por las que los poros se bloquean. El ácido salicílico ayuda a despegar estas células entre sí, de modo que se desprendan dejando los poros desobstruidos para que el sebo puede circular libremente y no se oxide, lo que significa que C. acnes no lo coloniza, y reduzca la inflamación. Sin exceso de células de la piel que se adhieren entre sí, las nuevas células se mueven a la superficie eliminando las marcas residuales, la piel se vuelve más lisa y uniforme, para una tez más saludable.

 

 

Ácido hialurónico: el rejuvenecedor hidratante

 

El ácido hialurónico desempeña un papel clave en el mantenimiento y la restauración de los niveles de hidratación de la piel. Capaz de absorber hasta 1.000 veces su peso en agua, el ácido hialurónico ayuda a la piel a mantener todas sus estructuras vitales. También interviene en la producción de colágeno, lo que hace que la piel sea flexible. La cantidad de ácido hialurónico presente de forma natural en la piel disminuye gradualmente con el tiempo, por lo tanto, incluirlo en un producto para el cuidado de la piel ayuda a levantar y suavizar la piel. Por último, el ácido hialurónico también ayuda a que la barrera protectora de la piel permanezca intacta, evitando que los factores estresantes irriten la piel.

 

 

Una rutina de cuidado de la piel con ácido salicílico e hialurónico

 

Por lo tanto, los ácidos salicílico e hialurónico tienen acciones complementarias en una rutina de cuidado de la piel. Ambos se pueden incluir en un producto como un sérum.

 

Un suero de ácido salicílico e hialurónico, absorbido por la piel, ayuda a exfoliar, reduce la inflamación, hidrata y protege la barrera cutánea y mejora la tez de forma general. La combinación de los dos ácidos en un solo sérum proporciona toda la eficacia de cada uno, sin afectar necesariamente la tolerancia en la piel.

 

 

¿El uso de ácidos hialurónico y salicílico causa irritación?

 

Los beneficios de incluir ambos ácidos en un solo producto son numerosos, no menos importante es que una rutina de cuidado de la piel necesita un solo producto para lograr tantos resultados. Con el enfoque de ecobiología de Bioderma, utilizamos la cantidad mínima de ingredientes en nuestros productos, y solo aquellos que son necesarios, para garantizar su completa tolerancia y efectividad. A medida que se agregan más productos a una rutina de cuidado de la piel, el riesgo de irritación aumenta.

mujer sonriente

Ácido salicílico e hialurónico, eligiendo el producto adecuado para tu piel

 

Si estas interesado en incorporar a tu rutina un producto para el cuidado de la piel que incluya ambos ácidos en su fórmula, tómate el tiempo para encontrar el adecuado. Quieres un producto que satisfaga las necesidades específicas de tu piel. Los productos pueden diferir en las proporciones de cada ácido, para responder mejor a las condiciones individuales de la piel. Lo que es seguro es que verás una mejora en tus imperfecciones y cutis, una reducción de las líneas finas de expresión, al mismo tiempo que evitas toda posible irritación.